Alemania Federal, ya conocida por sus estrellas como Franz Beckenbauer, Gerd Müller, entre otros, no sería la única representante de este país en el Campeonato Mundial, ya que por primera y única vez, "Los otros alemanes" como era llamado el equipo de Alemania Democrática, se clasificaría a este torneo y daría la gran sorpresa al vencer en la fase de grupos a la misma Alemania Federal, con gol de Sparwasser, en un partido rodeado de tensiones políticas.
La gran revelación del torneo resulto la selección holandesa, bautizada como la “Naranja Mecánica”. Bajo la idea del “futbol total”, el equipo de Johan Cruyff revoluciono el juego. Pero las virtudes de Holanda no fueron suficientes, porque la selección local logro convertirse en un equipo sólido en torno a la figura de su capitán, el Kaiser Franz Beckenbauer, y tuvo el temperamento necesario para sacar a relucir lo mejor de su repertorio en la gran final.
El 7 de Julio en el Estadio Olímpico de Munich la historia la escribió el equipo dueño de casa, dirigido desde el banco por Helmut Schoen. Con goles de Paul Breitner y Gerd Müller, los teutones ganaron 2 a 1 y se adueñaron de su segundo título mundial.
Se puso en Juego
Esculpida en oro macizo de 18 kilates por el italiano Silvio Gazzaniga, la Copa Mundial de la FIFA reemplazo desde 1974 a la Jules Rimet, que quedo en poder de Brasil.
Esculpida en oro macizo de 18 kilates por el italiano Silvio Gazzaniga, la Copa Mundial de la FIFA reemplazo desde 1974 a la Jules Rimet, que quedo en poder de Brasil.
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