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Con este resultado los sudamericanos quedan a un paso de octavos de final con 4 puntos y a la espera del partido final frente a Nueva Zelanda.
El seleccionador paraguayo, el argentino Gerardo Martino, decidió darle más poder ofensivo a su equipo con relación al que, con ciertas precauciones, igualó 1-1 con Italia, actual campeón mundial, en el debut.
Roque Santa Cruz que formo parte del tridente ofensivo que empezó las acciones, avisó con un remate colocado a los dos minutos que a duras penas el portero eslovaco, Jan Mucha, mandó al saque de esquina.
Cristian Riveros dio otro toque de atención al minuto 17, cuando remató a la portería rival desde posición frontal y el portero eslovaco volvió a responder bien.
La clara supremacía de Paraguay, en posesión del balón y ambición ofensiva, tuvo su premio en el minuto 22.
Lucas Barrios recogió un rebote cerca del área, corrió de forma paralela a la portería y puso el balón en profundidad para Enrique Vera.
El centrocampista de Liga de Quito ganó en velocidad y tocó el balón casi con sutileza con la cara externa del pie derecho para marcar la apertura para el equipo paraguayo.
La selección eslovaca intentó reaccionar y al menos pisó el área de Justo Villar en un par de ocasiones peros sin riesgo.
Un error defensivo casi les cuesta caro a los guaraníes. Tras un saque de esquina, Kornel Salata saltó solo dentro del área. Pero el cabezazo del defensa del Bratislava de su país se fue apenas por encima del larguero. Respiró aliviado Justo Villar y los cientos de paraguayos que llegaron al estadio para ver el partido.
El segundo tiempo fue muy parecido, Paraguay se dedicó más a cuidar la ventaja, Martino quitó del campo a Haedo (delantero) para dar ingreso a Torres (defensa) y formó un muro casi infranqueable frente a su valla.
Eslovaquia siguió jugando igual, agrupada en su zona y soñando con un contragolpe que nunca llegó.
El equipo paraguayo tendría otra opción de gol por medio de su delantero Roque Santa Cruz, escapó por la izquierda, puso el balón al centro del área y el cabezazo de Vera, libre de marca, rozó el larguero derecho de la portería rival.
Así culminó el partido, con un equipo paraguayo que mereció más goles y ya piensa en octavos de final, mientras que los eslovacos tienen alguna esperanza de clasificar.
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